domingo, 24 de agosto de 2008

Por responder


Saturno devorando a sus hijos, Francisco de Goya






Todas las mañanas del mundo
son caminos sin retorno.

¿y a dónde te diriges?

Al mañana, al tiempo no perdido,
sino reutilizado en garabatos,
que sobrevivan al olvido.

Vives pues para sobrevivir al tiempo, ¿no?

El tictac de los relojes parece
un ratón que roe el tiempo.
Un joven en años puede ser viejo en horas, ¿sabes?

No has respondido a mi pregunta.

Lo sé.
Como no tenemos nada más precioso que el tiempo,
no hay mayor generosidad que perderlo
sin tenerlo en cuenta.