domingo, 29 de septiembre de 2013

Todas las cosas buenas, creo, deben tener su fin.
Ya sea como han tenido su principio, o según se mire
porque nos gusta saber siempre su porque.
A todos nos gustan los finales felices, pero también
todos quisimos ser astronautas, y no quise perder,
perderte, perderos, perderme.
Los finales son necesarios
con o sin estruendo final, con aplauso y ovación,
o con la mas dura frialdad como último regalo.
Doy gracias por ellos, y ese recuerdo cada día
el de nuevo, poder esbozar una media sonrisa
acordarme de todo, y de todo aprendido
que dentro de un final, se oculta
un brillante principio.






sábado, 7 de septiembre de 2013

Quiero dejar por escrrito
que aunque mi mundo, se haya vuelto
y desenvuelto, diferente, del revés
no voy dejarme, aunque me quiera
dejar, ni abandonar
buscaré entre mi escasa, y peculiar
cordura, con la que saber
como saber quererte más.
Y es que de verdad es cierto
que se te echa de menos,
que nos volveremos cómplices,
de un crimen quincenal,
ni testigos ni cruel jurado:
solo el delito, de habernos juntado,
de enredar nuestros cuerpos
y no podernos desatar.