Parece que la escarcha inundo sus ojos
y presionando contra el cristal, se podía ver
la amplitud de movimiento
y la búsqueda de ese mundo interior
para el cual no había respuestas.
Quizás todavía no era primavera
o solo es que, no habría miedo
sin arrasar con las demandas internas
que palidecen de amor color marfil.
Finalmente, la caída o la suerte se desvaneció
y ambos fueron subiendo
para dejar salir su corazón desnudo.

Todo lo que pasa es que a partir de ahora
todo es lluvia intensa
y he torcido el sol que necesitaba
para sustituirlo
y una fuente oxidada, en el patio de abajo
se derrama por el suelo helado
mientras cruzo mis rígidas piernas
¿qué es lo que he sacado de esta pérdida?
Este no es el sonido de un hombre nuevo
sino el sonido del desbloqueo, y el ascensor que espera.
Tu amor estará a salvo conmigo.

Todas las cosas buenas, creo, deben tener su fin.
Ya sea como han tenido su principio, o según se mire
porque nos gusta saber siempre su porque.
A todos nos gustan los finales felices, pero también
todos quisimos ser astronautas, y no quise perder,
perderte, perderos, perderme.
Los finales son necesarios
con o sin estruendo final, con aplauso y ovación,
o con la mas dura frialdad como último regalo.
Doy gracias por ellos, y ese recuerdo cada día
el de nuevo, poder esbozar una media sonrisa
acordarme de todo, y de todo aprendido
que dentro de un final, se oculta
un brillante principio.

Quiero dejar por escrrito
que aunque mi mundo, se haya vuelto
y desenvuelto, diferente, del revés
no voy dejarme, aunque me quiera
dejar, ni abandonar
buscaré entre mi escasa, y peculiar
cordura, con la que saber
como saber quererte más.
Y es que de verdad es cierto
que se te echa de menos,
que nos volveremos cómplices,
de un crimen quincenal,
ni testigos ni cruel jurado:
solo el delito, de habernos juntado,
de enredar nuestros cuerpos
y no podernos desatar.

"Por favor, no me hagas daño, amor"
Yo también soy muy frágil y ahora
puedo estar de nuevo en el blanco,
de tus ojos, mezclado con la distracción
constante que tienes hacia mí.
No me tienes que hacer ninguna promesa,
tan solo la esperanza de no asesinar el tiempo,
no mas espinas en el costado.
Solo crezcamos y sintamos
el mismo miedo juntos
alejándonos de los bordes de la cama
y de los monstruos y fantasmas
que se podrían colar entre las sábanas.
perdiendo así, nuestros corazones inocentes.
Pero al menos no lo haremos solos.

Me gusta pensar que soy dos veces yo,
que por una parte soy cruzar ríos y soñar alto,
viajar lejos y vivir siempre un año menos,
pero que por otra soy de color gris pálido
huraño, hipócrita, frustrado, un ser extraño.
Soy de los que brinda por poder dolerme
de mis profundas heridas, ya que sin ellas
perdería la noción de que soy aun
algo de quien fui.
Me gusta pensar que soy de los que celebra el sol
romántico melancólico, que prefiere robar una sonrisa
enredada en una sabana de mañana, antes que un beso
congelado de noche por escarcha.
Soy de los que acaricio con la punta de los dedos
para mantener mi inconsciencia de equivocarme en todo
ya que aun no me he perdonado
el haber hecho tanto tiempo lo correcto.

Me he convencido, poco a poco,
de que los monstruos no existen,
que somos un reflejo de nuestro pasado
y un esbozo de nuestro futuro
que solo somos tan grandes como seamos
porque a nadie debería importarle
que nos asustamos fácilmente, pues
no por ello somos cobardes.
Solo tu eres tus propias fronteras
y solo tu, deberías ser tu propia nación.

Y ya está.
Así como me había blindado,
yo mismo he acabado por ser
mi propia respuesta.
Y he cargado mi espalda de ideas
que llevar conmigo a cualquier lado.
No ha sido fácil y seguro nadie sabe
y claro, menos le importa
como ha pasado, lo pasado, al pasado
siempre me quedará un sabor amargo
una canción, una sonrisa, la habitación
un paseo solitario, hacia cualquier lado
una cicatriz imborrable, que mostrar
a algún amor de verano.

Nunca volveremos a estar aquí
porque ahora esta en mi memoria,
solo cortad las cuerdas cuando este en los mas alto
y dejadme caer.
No diré que había que ser paciente
al igual que nunca supe
que pudiera llegar a albergar tanta tristeza
pero lo he hecho, y es parte de mi, aparte de mi.
Seguro aun sigue en tu cabeza, devastando y golpeando
y es que al final no fuimos tan magníficos
acabamos extraviados por encima de nuestros pies
y celebro lo aprendido por como me compraste
ya decir nada es verdaderamente suficiente, para mi.

Solo se que llevo
mucho tiempo de bolsillo
que llevo mucho daño conmigo
debe de servir de algo
haber perdido, sentido perdido
si gano algo por lo vivido
si logro que me conozcas bien
que entiendas que todo lo que hago
mal o bien, con o sin sentido
solo es por miedo a mi mismo
a que se me escapa el aire
miedo a acabar sin tí
por estar contigo.

Admito en voz alta, mirando al frente
que cuando la melancolía es un trago
demasiado amargo, he pensado
en renunciar.
Pero es que has entrado como
si estuvieses hecha de aire
y me alegro, y me niego
te has acabado por hacer un hueco
y cuando el aire huele a gasolina
me entran ganas de gritar, da miedo
de verdad que da mucho miedo
si en un espacio en el que ni yo entro
pretendemos caber los dos
y resistir hasta el próximo invierno.

Nos hemos encontrado en una etapa extraña
de nuestras vidas.
Yo he aprendido a vivir con prisa
no crear sueños, que se vuelvan monstruos
hacer de una maleta medio hecha tu mente
siempre a expensas de escapar
de un viaje pendiente
disfrutar cada minuto que pasemos
"carpe diem" te digo, solo presente
si no somos mas que un recuerdo vivo
¿que quedará para el futuro? Está pendiente
en tu memoria o en la mía
como un borrador de lo que es
un recuerdo, de lo que fue.
Acabaremos estando lejos
y volveremos a encontrar a alguien
con quien poder parar el tiempo.

Solo estoy decepcionado por mí
como lo estarías tu.
Solo no me hace caer hacia ti
perder el hábito, el gusto, de estar solo
y estar bien,  yacemos en la cama
y me veo tan lejano, aunque sea joven
me creo 60 años mayor
y tus brazos alrededor de mi
guardan el calor,
pero aun puedo sentir el frío.
Tienes que saberlo, algún día.
Y siento en alguna manera
podría sentirlo, y debe sentirse raro
que aun este aquí
sabiendo que yo ya lo encontré
y como lo tuve, se fue.

"No me conoces, ni sabes nada de mí"
Te dije una noche, sabiendo
que somos los dos, extraños insectos
supervivientes, habitantes de mundos distintos
pero en los dos hubo miedo, hizo frío
creyentes sin fe, cuerpos sumergidos
criaturas salvajes, con mucho que dar
y que perder, con un mal principio
final incierto, guión reescrito
un caso abierto, y muchos
muchos Domingos.

Soy un extraño de mi mismo, en eso
me he convertido, el chico gris
de la mirada triste, que lo ha hecho todo
para intentar sobrevivírnos.
Cargaré solo con mis cicatrices
me acostumbraré a seguir pensando
que tuvo que ser así
viviré con miedo, y seré perseguido
por todos los recuerdos
saldré perdiendo, y seguiré
dentro de mi cuerpo
viendo pasar los días
hasta que quede limpio, de nuevo.